El proyecto demandó una inversión inicial de US$ 1,5 millones, donde convergen desde grandes empresas hasta startups , la academia y el mundo público, con el fin de abordar de forma colaborativa los desafíos y soluciones de la movilidad sostenible del futuro.
Con más de 20 socios iniciales, Emasa dio el vamos oficial a su disruptivo proyecto de crear el primer hub de movilidad de Latinoamérica. Se trata de un espacio de 1.200m2 ubicado en la comuna de Vitacura, donde convergen distintas organizaciones, sirviendo como un centro integral que aglutina capacitaciones, entrenamiento físico, venta de productos y servicios, cowork, certificaciones, etc.
El proyecto Emasa Mobility Hub demandó una inversión inicial de US$ 1,5 millones, de un presupuesto total de US$ 5 millones, saldo que será destinado a la operación del mismo, como también a la ampliación de otros espacios o servicios, como por ejemplo un taller mecánico tipo para vehículos eléctricos.
“Armamos una estrategia potente de ambiestría donde, por un lado, mantenemos el negocio central de la compañía y, por otro, entramos al mundo de la movilidad donde sin ser expertos vimos la oportunidad de estar a través de este proyecto, creando un ecosistema que integra a todos los actores de esta área y donde todos son bienvenidos como la competencia, el gobierno, las startups, los fondos, las aceleradoras, etc.”, señala Víctor Ide, gerente general de Emasa, quien añade que el hub surge precisamente como un punto de encuentro entre quienes están pensando en estos desafíos y soluciones, sin descartar, a su vez, replicar más adelante este modelo en otros países de la región, siendo Perú y Colombia las opciones que tienen en vista. “Es un ecosistema abierto para todos aquellos que quieran potenciar la movilidad en el país”, recalca Ide.
Al respecto, Arsenio Fernández, gerente corporativo de Innovación y Nuevos Negocios de Emasa, profundiza que este hub “es el vehículo por el cual Emasa hace realidad su propósito de ser un habilitador de la movilidad sostenible del futuro”.
En cuanto a los miembros activos, Fernández indica que hay desde grandes empresas hasta startups, academia y mundo público. Aquí destaca a Bci y Copec Voltex como socios principales, “con quienes firmamos una alianza estratégica para avanzar juntos en el desarrollo de productos, servicios y nuevos modelos de negocio”, añade Ide. Por ejemplo, agrega Fernández, apoyar el emprendimiento vía el programa Valor Pyme de Bci, como también a los usuarios con Copec y la construcción del centro de carga de autos eléctricos más grande de la zona oriente de Santiago, con 10 cargadores para flotas y público en general.
La idea, señalan, es seguir sumando más actores del ecosistema, apuntando también a organismos estatales, con quienes ya están en conversaciones: “De aquí a fin de año, queremos contar con 50 o más miembros”.
Colaboración abierta
El hub, además, firmó alianzas con importantes centros de investigación de EE.UU., con el fin de generar una red que incluya a los actores globales que están desarrollando y generando proyectos sobre las macrotendencias tecnológicas vinculadas con la conectividad, electromovilidad y movilidad compartida y autónoma, para así generar oportunidades de negocios e investigación y desarrollo en conjunto. A la fecha, son 7 las organizaciones que forman parte de la Red Internacional de Movilidad: Detroit Mobility Lab, Michigan Mobility Institute, Pem Motion USA, California Mobility Center, William Davidson Institute at The University of Michigan, Hubspot for Startup y Amazon Web Services.
Noticia publicada originalmente en el cuerpo de Innovación de El Mercurio